Sin duda alguna todos conocen la historia de Pinocho, la bonita y feliz de Disney, y muchos también saben que esa versión sólo está basada en otra, la original, que es una versión mucho más macabra, pero pocos en realidad conocen todos los sucesos siniestros que rodean la historia. Pues si quieres conocerlos, aquí te los presento:
El carpintero Geppetto es un humilde hombre que siempre había deseado tener un hijo. Un buen día se le ocurre la genial idea de tallar una marioneta de madera con la forma de un niño de verdad. Antes de estar terminada, esta cobra vida inesperadamente y se convierte en un niño travieso y desobediente al que Geppetto llama Pinocho.
Sinopsis
La historia desde el inicio comienza macabra y sombría, ya que, en los primeros capítulos del libro, un maestro carpintero encuentra un trozo de madera que utilizaría para reparar la pata de una mesa, pero cuando empieza a trabajar con él, el tronco llora cuando lo tallan, suplicando por su vida para que dejen de lastimarlo, cosa que aterró por completo al carpintero.
Entonces, el maestro carpintero recuerda a su amigo Geppetto, quien le pidió un pedazo de madera para fabricar un títere (Geppetto era un humilde carpintero que siempre había deseado tener un hijo, por ello se le ocurrió la idea de tallar un muñeco con la forma de un niño). Cuando Pinocho estuvo terminado, salió corriendo de la casa para escapar, Geppetto intentó alcanzarlo para que regresará a casa, un policía lo ayuda a detenerlo y, como todo padre, comenzó a regañarlo por salir corriendo de esa manera, Pinocho comenzó a llorar y fingió estar asustado, por lo que el policía pensó que Geppetto era un mal padre y lo arrestó.
De esta manera Pinocho regresó a su casa feliz. En ella encontró a un Grillo que habla y éste le dice que está actuando más y que debe comportarse mejor, entonces Pinocho se enoja con el Grillo porque según él, alguien menos inteligente no debería decirle qué hacer, así que, enojado, agarró un martillo de la mesa de su padre y se lo arrojó, aplastándole la cabeza al Grillo y dejándolo embarrado en la pared.
Después de un rato, a Pinocho le da hambre y busca comida sin mucho éxito, por lo que lamenta que su papá no esté para ayudarlo. Decide entonces salir a buscar comida con un vecino, pero es una noche de tormenta, al tocar a la puerta para pedir comida, no le abren, y en cambio le arrojan agua con una cubeta. Empapado por eso y la lluvia, regresa a su casa hambriento, mojado y triste; esto hace que se acueste junto a la fogata para secarse y calentarse, pero se queda dormido muy cerca del fuego, tanto que se le queman las piernas hasta volverse cenizas, cuando despierta y se da cuenta de lo ocurrido, llora muy asustado.
Esa mañana, Geppetto fue liberado y regresó a casa, pero la encontró cerrada, tocó y tocó y le gritó a Pinocho que le abriera, pero él respondió que no podía caminar, entonces Geppetto se enojó pensando que Pinocho decía mentiras y siguió golpeando la puerta hasta que la abrió, lo que vio lo asustó, y lo preocupó, Pinocho decía la verdad, se encontraba tirado en el suelo, sin piernas y llorando. Cuando Pinocho le cuenta la historia de lo que sucedió y que tenía hambre, Geppetto le da tres peras que tenía para desayunar él, y le crea unas piernas nuevas con la condición de que Pinocho irá a la escuela, para eso, Geppetto vende su chaqueta para poderle comprar un abecedario.
Al día siguiente, de camino a la escuela, Pinocho escucha algo de música y se acerca a ver, se trataba de un teatro de marionetas, este le interesó mucho y quiso entrar a ver, pero tenía que pagar para entrar, así que decidió vender su abecedario a un revendedor de telas usadas.
Al entrar, dos de las marionetas lo reconocen y le hablan y, cuando lo llevan tras el escenario, las demás marionetas se emocionan también al verlo y se acercan a platicar con él. Esto hace que el espectáculo se retrase y que el público se impaciente, por lo que el dueño titiritero se enoja y va a ver qué ocurre, al ver que todo lo causa Pinocho se enoja e intenta quemarlo en la hoguera, sin embargo, al escuchar sus gritos cuando comenzaba a quemarse, se enternece y lo saca del fuego, además le da cinco monedas de oro para que se las dé a su padre.
De camino a casa, un zorro y un gato ven que Pinocho lleva dinero y lo engañan para robarle, le dicen que existe un monte mágico que hace crecer el dinero si lo siembras ahí, así que Pinocho se va con ellos. Cuando se hace tarde, los dos animales le sugieren hacer parada en una taberna, en donde comen sin parar y hacen que Pinocho pague todo. A la mañana siguiente, Pinocho despierta y los animales ya no están, pero en su lugar se encuentra con el Grillo que habla –de alguna manera porque estaba muerto, o con su fantasma quizá–, y éste le dice que no se deje engañar y que regrese a casa con su padre, pero Pinocho lo ignora y continúa su camino al monte mágico. De camino se encuentra con unos asesinos que intentan robarle su dinero, pero, al verse en peligro, Pinocho corre y se mete a una casa, en donde el fantasma de una niña se le aparece. Los asesinos lo encuentran ahí e intentan acuchillarlo repetidas veces, pero al ser de madera, no lo lastimaban, así que entonces decidieron colgarlo de un árbol hasta que muriera ahorcado y de esa forma le quitarían el dinero a su cadáver. Entonces, la niña fantasma, que resultó ser un hada, decide bajarlo del árbol y ayudarlo, aun así, Pinocho la engaña diciéndole que le robaron el dinero y por eso le crece la nariz.
Pinocho prosigue su camino al monte y siembra su dinero y cuándo va a revisar si ya está creciendo, se da cuenta de que le han robado.
Triste, intenta regresar a casa pero en el camino le da hambre e intenta comer un racimo de uvas de un jardín, pero el jardinero lo descubre y lo atrapa y como castigo lo obliga a permanecer en su jardín como perro guardián. Durante esa noche, unas aves llegaron al jardín e intentaron sobornar a Pinocho para robar, pero él no accedió y denunció a las aves, y por esta acción el campesino lo recompensó dejándolo libre.
Finalmente, Pinocho regresa a casa, pero descubre que no hay nadie, una paloma se acerca y le dice que su papá se ha ido a buscarlo y que se fue al mar, así, Pinocho ve a su padre desde la playa, entre las olas, y decide lanzarse al mar para alcanzarlo, pero al ser él de madera, se va flotando a la deriva.
Luego de un tiempo, Pinocho llegó a una isla, en ella comenzó a buscar comida o dinero y, aunque todos ahí accedían a darle algo a cambio de trabajo, él mismo los rechazaba. Una de las personas que querían ayudarlo era el hada, pero en esta ocasión como una mamá, al verla, aPinocho le da mucho gusto y promete ir a la escuela y ser bueno y se queda con ella. Al día siguiente va a la escuela como lo prometió, estudia y hace lo que le piden, pero desafortunadamente se juntó con los amigos que no debía y lo convencen de hacer algo indebido, esto le mete en problemas de nuevo, al punto de casi morir frito, ya que un pescador lo atrapó en sus redes y pretendía comérselo.
Cuando regresó a casa, el hada no estaba, le quiso dar una lección, y como Pinocho se arrepintió profundamente, al día siguiente lo convirtió en un niño de verdad. Para celebrar le iba a hacer un gran desayuno, y Pinocho iba a invitar a su amigo Lucignolo. Al encontrarlo, éste le comenzó a contar sobre el país de los juguetes y que se iría para allá en un carro que saldría muy pronto, sin necesitar mucho para convencerlo, Pinocho se va con él y disfrutan por cinco meses, pero al despertar un día descubren que se están convirtiendo en burros poco a poco, lo primero en crecerles fueron las orejas y la cola. Tristemente se dan cuenta que el país de los juguetes era una trampa para secuestrar niños y convertirlos en burros de trabajo, entonces Pinocho es vendido a un circo en donde pretenden entrenarlo para hacer trucos de payasos con aros y fuego. En su primera función en el circo, Pinocho se da cuenta de que el hada está presente entre el público e intenta llamarla, pero no consigue más que pronunciar rebuznos y el hada se va. Triste por como acabó su vida, no se concentra en los trucos y resulta herido en un aro de fuego; inservible ahora para el cirquero, lo vende y éste nuevo dueño pretende hacerse un tambor con su piel.
Para matarlo, este comprador decide ahogarlo en el mar. Al cabo de un rato, cuando el comprador lo saca del mar, descubre una marioneta en lugar del burro, ya que los peces se habían comido la piel. Pinocho escapa y acaba de nuevo a la deriva en el mar, y justo cuando llegó a una playa, una cabra con el pelo del color del hada, intentó advertirle del peligro, pero fue muy tarde porque Pinocho no pudo evitar ser comido por un tiburón. En el interior se reúne con su papá, Geppetto, que había sido tragado por el tiburón tiempo atrás mientras buscaba a Pinocho, juntos elaboran un plan de escape que da buenos resultados, sin embargo, Geppetto no sabe nadar y es Pinocho quien lo tiene que llevar nadando a la superficie.
Al llegar por fin a su casa, Pinocho se encuentra con varios de los malos, pero en esta ocasión no se deja engañar por ellos y se va con su papá.
Al final, Pinocho aprendió de todas estas experiencias, trabaja para ayudar a su papá y se convierte en un niño de verdad.
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